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miércoles, 2 de septiembre de 2015

Ortiz Nuevo pide ayuda para concluir y publicar el libro "La Valiente"

Como editora de Libros con Duende, estoy trabajando con José Luis Ortiz Nuevo en su nuevo libro sobre Trinidad Huertas "La Cuenca".
Con este fin os adjunto una carta que él ha redactado. 
Quien esté interesado en colaborar con este interesante proyecto puede ponerse en contacto con la editorial para que le mandemos la información oportuna.
El correo electrónico de la editorial es librosconduende@gmail.com o al teléfono 695641579
Sin más, un atento saludo

Rocío Navarro

CARTA DE JOSÉ LUIS ORTIZ NUEVO

Queridos amigos y amigas:

Desde que principié en 1997 a investigar huellas delo andaluz en las hemerotecas de La Habana -prensa de la primera mitad delsiglo XIX-, he tenido la grata sensación de poder contribuir a que la memoria delo Flamenco se enriquezca con un formidable ramo de nuevos argumentos, queensanchan los horizontes de su conocimiento y reclaman nuestra atención en milcaminos diversos.

Ahora estoy en uno de ellos: Terminar de recabar y ordenar la documentaciónprecisa para redactar el texto: “La Valiente – Obra y Vida de Trinidad Huertas “La Cuenca” - (Málaga, 1857 – La Habana, 1890)”. Ciertamente una mujer, unaartista, una andaluza excepcional. Según consta empezó a actuar en público a laedad de once años, y en su corta y a la vez enorme trayectoria profesional brillóde modo rutilante hasta meses antes de morir, tan joven, en La Habana. Fue laprimera que se vistió de hombre para bailar, y uno de sus éxitos cabales era lainterpretación de una faena taurina, de principio a fin. Triunfó de manera apoteósicano solo en su tierra natural sino en Madrid, París, Nueva York, Méxicoy La Habana. También tocaba la mar de bien la guitarra y era capaz de acompañardivinamente las Malagueñas que los tenores de entonces solían cantar enlos teatros.

Sabemos ya bastante sobre ella, tenemos datos; pero sustancialmente faltan informacioneshabaneras de la época -en este momento disponemos casi de unasola fuente: el Diario de la Marina-, y otrosí de sus actuaciones parisinas y enotras ciudades. Este es el trabajo de indagación pendiente.

Para realizarlo quiero viajar a La Habana -donde aún no llegó la digitalizacióna sus hemerotecas-, en el próximo mes de noviembre; y localizar por interneto in situ, las informaciones que sobre La Cuenca haya, inadvertidas todavía, apropósito de sus tres temporadas en París (1880, 87 y 89), y de otras esporádicasactuaciones suyas en Berlín, Viena, Oporto, Dresde, Valencia…

Con estos nuevos materiales me aplicaré en redactar el libro por mor de la famosabailadora, que espero terminar a tiempo de que sea publicado el 8 de mayo delaño entrante, aniversario de su nacimiento.

En esta fecha, quienes accedáis a colaborar, recibiréis un ejemplar en ediciónespecial y numerada del libro, con firma del autor si se requiere, y un apéndiceen el que figuren los nombres de los contribuyentes, si no es que se prefiere elanonimato. La cuota establecida por la editora para cubrir los gastos precisos esde 25 euros, lo que da derecho a la recepción sin gastos de la obra.

Y siempre mi gratitud de veras.

                                                                                  José Luis Ortiz Nuevo
                                                                                  En Sevilla, a 2 de septiembre de 2015


NOTICIAS SOBRE TRINIDAD HUERTAS "LA CUENCA":

La compañía española andaluza de Don Antonio Calzadilla, en la que figuran algunos yalgunas artistas de Málaga, en el género flamenco, ha terminado su temporada teatralen París, y salido para Viena a hacer la temporada de verano, dando de paso algunasrepresentaciones en Berlín, Dresde y Praga.

Tendrán que oír las ocurrencias y las cosas que de este cosmopolita viaje contarán la Parrala, Trini, Cuenca y demás alegre compañía, cuando regresen a nuestra tierra)

                                        (Sevilla. El Universal. 9 de junio de 1880)

                                                                ******

                                                       Trinidad Cuenca

La graciosa bailarina española que comienza hoy su debut, en el Teatro Principal, seha metido al público en el bolsillo. Este excelente público se ha encaprichado con esepiececito andaluz o madrileño. Y toda la alta casta de Tenochtitlán —los viejos con lacabeza perdida— han considerado un sagrado deber el ir todas las noches a ver a ladeliciosa bailarina. El do de pecho del tenor de la compañía Siena no tiene seguramentetanto éxito como la agitación de los pies de Cenicienta de Trinidad. Es una segundaconquista española de Méjico. Pero, esta vez, los fieros conquistadores están representadospor una maja aguerrida, sin duda, pero que se vale para atacar de sus grandesojos negros, y, para defenderse, de un refajo bordado, como sólo se ve en el dulce paísde las castañuelas.

Si el bueno del Sr. Soot quiere creer a quien se precie en reconocer sus esfuerzos porcomplacer al público, conservará a la Sra. Cuenca en su nómina mucho tiempo más, paraque el cajero del principal tenga la ocasión de frotarse las manos, lo que es, entre loscajeros de teatro la prueba más inequívoca de íntima satisfacción.

                              (Ciudad de México. Le Trait D´Union. 2 de octubre de 1887)

                                                                  *****

Debut – Trinidad Huertas “Cuenca” la toreadora española en carácter, que ha bailadoen los principales teatros de España, Francia, Estados Unidos, Méjico; distinguida ycélebre bailadora de flamenco, y excelente tocadora de guitarra, debutará el próximolunes en el Teatro de Cervantes.

La Cuenca es una mujer agraciada, con una fisonomía móvil y ojos sumamente expresivos.De pequeña estatura, con un talle esbelto y flexible. Lleva con mucho donaire eltraje de hombre, y sus posiciones son estéticas.

Sus bailes llaman la atención por su originalidad y por la gracia con que los ejecuta, ymientras ella está en escena tiene subyugado al auditorio que sigue con admiración lasondulaciones de su cuerpo y el movimiento de sus pequeños pies.

Hay naturalezas que nacen dispuestas al arte y a éstas pertenece la hermosa malagueñaCuenca. El arte escénico lo lleva en sí, y lo mismo tiene todos los atractivos de unacándida vestal, que la traviesa y retozona coquetería de una chula.

La Cuenca es una notabilidad en su género, y aconsejamos a nuestros lectores no dejende asistir a alguna función en el Teatro de Cervantes para admirar su gracia y habilidad.

                                (La Habana. Diario de la Marina, 16 de diciembre de 1887)